Por Tomás Hermán.
El kazajo campeón mundial medio AMB/OIB, Gennady Golovkin, defendió sus títulos ante el norteamericano Curtis Stevens por abandono de éste al término del octavo asalto.
Golovkin crece más y más. Un duro Stevens con una serie de victorias en racha se presentaba para su oportunidad mundial con opciones, aunque fueran pocas. El kazajo marcó su ritmo desde el primer momento, en línea colocando sus potentes golpes largos mientras que el aspirante se cerraba en guardia de escudo para intentar contragolpear. En el segundo asalto un crochet de izquierda por parte del campeón mandó al piso al aspirante quien pareció asombrarse del poder de pegada de su contrincante. Se levantó y pudo aguantar hasta el final de la ronda. Parecía que todo iba a terminar para Stevens, pero se recompuso y ofreció unos asaltos interesantes. Esperó a Golovkin muy cerrado para conectar sus golpes rápidamente en contraataque y llegó en varias ocasiones, aunque no hizo parpadear al campeón.
El kazajo tuvo que sudar y se colocó en una distancia corta para cambiar golpe por golpe, aun sabiendo que su defensa es menos eficiente que su ataque ya que se basa en cortos desplazamientos lineales para entrar o salir de la distancia. Con todo, dio espectáculo y sacó mejor partido que su rival proporcionándole un severo castigo que le llevó a retirarse tras el término del octavo asalto. Una decisión muy inteligente por parte de su esquina, la cual se lo confirmó al árbitro de la contienda que ya se encontraba cercano a esta elección.
Al término del evento, le preguntaron a Golovkin por su siguiente rival, y nombró a "Maravilla" Martínez y "Chocolate" Quillin, los otros sólidos campeones de la categoría. "Maravilla" ya parece estar en negociaciones para una pelea con Cotto, pero un enfrentamiento con Quillin sería tremendamente atractivo para la afición en un duelo de invictos noqueadores. Aunque sigo pensando que el kazajo vencería antes del límite.
