"Chop Chop" Corley sorprendió noqueando a McCloskey


Por Tomás Hermán.
Foto: Scott Heavey/Getty Images Europe.

Demarcus "Chop Chop" Corley consiguió una importantísima victoria al noquear en el décimo asalto al británico Paul McCloskey en su tierra natal.

Los mentores de McCloskey, tras una lúcida victoria en el ultimo combate de éste ante Prescott, el verdugo de Khan, decidieron traer a Corley en lo que creerían ver un combate más como preparatario hacia el mundial, ya que el americano contaba con 19 derrotas a sus espaldas y 37 años de edad, no debiendo ser un gran problema para su pupilo. Paul, con tan solo una derrota accidentada ante Amir Khan en disputa del mundial, donde un corte le impidió superar el ecuador de la pelea, estaba preparado para llamar a puertas mayores. Pero... ¿y Demarcus? 

Demarcus Corley, un púgil que como amateur fue Campeón del Golden Gloves en 1995, y al año siguiente ya debutó como profesional. En 2001, Corley fue avisado para disputar el Campeonato del Mundo Superligero OMB ante Felix Flores, con tan solo cinco días de antelación. "Chop Chop" solo necesitó un asalto para noquear al boricua. Realizó dos defensas del título, ante Ener Julio y el duro pegador Randall Bailey, antes de perderlo en la tercera ante Zab Judah en una apretada decisión. A partir de ahí, recorrería una serie de victorias y derrotas, aunque más derrotas que victorias ante los mejores en su categoría como Floyd Mayweather Jr, Miguel Cotto, Junior Witter, Devon Alexander, Marcos Maidana... en disputa de campeonatos mundiales, y recientemente ante prospectos en auge como Lucas Mathysse, Thomas Dulorme o Ruslan Provodnikov, el pasado año. Pero 2012 iba ser muy distinto para el de Washington. En enero rompió el invicto del boricua Gabriel Bracero conquistando el título NABF Superligero, lo que supuso una importante inyección de moral para disputar el combate ante McCloskey.

Demarcus se desplazó hasta el Norte de Irlanda para enfrentarse al británico en un apasionante combate. Cauto en sus movimientos, le tomó la medida a su rival asalto tras asalto. Economizando energía, frío en sus movimientos y con la paciencia propiciada por la experiencia, contragolpeaba a su oponente recibiéndolo con su potente crochet de derecha, mostrando al público el arma que le abriría la puerta del triunfo, llegándole en varias ocasiones al mentón y notando los efectos de su precisión. McCloskey sonreía, pero sus piernas flaqueaban. Se estaba prediciendo el desenlace. El décimo asalto sería el definitivo donde el americano volvió a conectar su crochet de derecha perfectamente ejecutado y poner a bailar al británico con unos pasos desestabilizados que obligaron a la sabia intervención del árbitro para detener la contienda. Fantástico.

¿Alguien pensó que Demarcus se encontraba en una situación de trampolín para prospectos? Pues se equivocó. Enhorabuena a "Chop Chop" por su victoria. Aun le queda talento de sobra al americano para doblegar a cualquiera.